Cafeteria:...

Se levanto esa mañana como de costumbre, tranquila y suspirando de cuando en cuando por no tener nada entretenido que hacer.

-Otro dia... joder... en este lugar no ocurre nada -Penso mientras caminaba en silencio hacia una cafeteria que habia visto el otro dia. Al llegar pidio una tasa de te y se sento en una de las mesas de afuera mirando pasar la gente aunque realmente poco le importaba ver caminar a los humanos pero no tenia nada mejor que hacer...

Íbamos caminando, esa era lazona donde vivía Akeru como humana y esperaba encontrarla.

Por supuesto me había percatado de los dos soldados que nos seguían, pero matarlos sería una imprudencia.

Miraba a mi alrededor a ver si veía a mi "hermana". La chica resultó estar sentada en una mesa de afvuera de una cafetería.

-Ahí está.- Le dije a Caos, y me acerqué a Akeru.

-Por fin te encontramos.

Estaba algo distraida, pensando o mas bien mirando cual quier cosa que resultara interesante asta que me percate que un poco apartado se acercaba Envy junto con la pequeña de Caos.. -tsk... aqui viene el pequeño torbellino -pense al ver a caos y suspire mantenienme fria asta que escuche hablar a Envy.

-Felicidades me encontraron.. -tomando algo de te -hay algo mas interesante que hacer que ver pasar la gente?...

- Akeru-chaaaan! - La saludé - Claro que hay algo más interesante, pero antes, puedo pedir que me traigan una paleta de caramelo? x3 Ah, también quiero un peluche, dónde venden uno? :3 - Pregunté emocionada, mientras observaba a mi alrededor.

Le sonrei a la pequeña lo mas falso posible claro que en mi no era de notarse mucho...

-Claro pequeña Caos, si vas a la otra calle encontraras un gran edificio de color marron donde te daran todas las paletas que quieras e incluso te regalaran cuanto peluche gustes -dije señalando un poco al frente donde se veia el edificio marron casi apunto de caerse.

Vale, el principio de la mentira era creíble, pero al mirar hacia dónde señalaba y ver el edificio... Simplemente ya no me lo tragaba. Con el tiempo y a base de creerme mentiras había aprendido a detectar algunas.

- Akeru, no volveré a caer. Puede que sea inocente, pero que sea la más menor no significa que sea tonta - Le respondí mientras agitaba los brazos histéricamente y hacía un puchero.

-Anda, piérdete un rato enana.- Le dije de mala manera, si dejaba a estas dos hablando nols podíamos pasar horas y horas perdiendo el tiempo.- Yo tengo que hablar con Akeru.

Miré a Envy con cara de enfado y le dije - No - Hablé en un tono mucho más serio del que uso normalmente - Este trabajo también es mío y ya empiezo a estar harta de que me infravaloren por ser la más pequeña de todos, así que dejad de tratarme como a una cría. Si tenéis que hablar de algo de la misión no tenéis derecho a echarme -

Oh, ahora la cría se ponía orgullosa. Bien, si quieres quedarte adelante.

-De acuerdo, pues explícale todo lo que ha pasado.

- Vale, no problem! Lo que ha pasado es que Envy me ha decapitado delante de un restaurante, entonces me he regenerado y todo el mundo nos ha mirado como bichos raros y se han ido corriendo. Entonces hemos entrado en el restaurante y yo me he comido una paleta y Envy una sopa (que por cierto la he preparado yo!) entonces una señora ha venido y nso ha preguntado cosas, después nos ha hecho recoger todo el estropicio que habíamos causado y yo lo he ordenado casi todo - No entendía porqué Envy me lo hacía explicar a mi, tan difícil era decir cuatro frases?

-Ordenar no significa destrozar, enana. Y el problema no es ese. El problema es que esa mujer esa uno de los perros de Mustang, Hawkeye si no me equivoco, y nos a puesto a dos militares a seguirnos, y no podemos matarlos o se armaría una buena.

- No me llames enana, es CAOS! C-A-O-S! Y ya sé que dos lerdos nos están siguiendo y que no podemos matarlos, pero teniendo en cuenta lo estúpidos que son los humanos no podríamos despistarlos o algo así? - Le contesté a Envy

-Anda si usas el cerebro y todo. Bueno, pues para despistarlos es para lo que quiero que Akeru nos ayude ahora.

- Claro que lo uso, y creo que incluso más que tu que no sabes ni memorizarte mi nombre! - Le dije casi chillando.

-A ver, E-N-A-N-A, me sé tu nombre, y hasta el estúpido ese que te inventaste, pero creo que te queda mejor Enana.

- Me prometiste que me dirías Caos! Además no soy enana! - Dije haciendo una pataleta

Decidí ignorar la primera parte y responderle a la segunda. Si es que hacerla rabiar es bastante divertido.

-¿No eres enana? ¿Cuánto mides? ¿1m? ¿1.10m?

- No ignores tus promesas! Y mido 1,34 , soy incluso alta para mi edad ¬¬ - Maldita palmera transformer... Siempre molestándome, luego decía que la molesta era yo.

-Oh, ¿en serio? Bueno, entonces te llamaré tapón.

- NO! LLÁMAME CAOS! O te llamaré palmera-transformer ò.ó - Una contestación bastante tonta por mi parte, pero situaciones ridículas requieren métodos ridículos.

-¿Recuerdas lo que te he dicho antes de entrar al restaurante? Aplícalo ahora.- Me refería a la amenaza de matarla tantas veces que desearía poder morir finalmente.

- Olvidas que yo también podría matarte ¬¬ - Tan enfadada como estaba, no me pensaba dejar intimidar por nada ni por nadie

-No lo conseguirías ni en un millón de años.- La niña se estaba enfadando y yo me divertía cada vez más.

- ¿¡ COMO QUE NO?! ¿¡ ME ESTÁS LLAMANDO DEBILUCHA?! ¬¬ podría matarte en un segundo si quisiese - Le respondí, en serio que ese tío me hacía enfadar cada dos por tres.

-Y yo a ti también, pero ahora me apetece molestarte, no pelear contigo. Y si no te importa me gustaría saber si a Akeru se le ha ocurrido algo para librarnos de los militares.